RÁPIDO Y FURIOSO

EDITORIAL 

27 de Junio de 2019

              Este fin de semana se terminaron  de conformar las listas de candidatos de las nueve fórmulas  que competirán en las PASO de agosto.  Temporada de rosca sangrienta, el evento dejó un tendal de heridos, mutilados y muertos por todo el campo de batalla, que es todo el país. No hay una mejor manera de ver la relación intrínseca entre política y territorio que en las listas de diputados y senadores que también expresan el pago de favores, promesas y alianzas estratégicas.

Por supuesto todo esto se realizó bajo una lluvia de sapos que ya amenaza con desaparecer la especie. Ningún lado de la grieta estuvo exento de todo esto, pero para nuestro periodismo independiente que chequea todo esto no fue así. El gobierno consolidó, consensuó, dio espacios para llegar a acuerdos programáticos… En cambio, del lado FF,  Cristina vetó, tachó, puso a dedo, y a los gritos ordenó que la Cámpora copara todo, dejando a Massa con cara de desconcierto mirando el horizonte y diciendo: “Dios, que he hecho”.

Lo que viene no pinta mejor. Apabullado por estadísticas que no traen buenas noticias, al parecer el gobierno oscila entre recibir una paliza en las PASO o perder dignamente, lo que le permitiría pelear una segunda vuelta en octubre. Ante este escenario, la mejor estrategia sería jugarse todo por el todo a la confusión de la gente que no puede distinguir a Aníbal Fernández de Alberto Fernández, confusión que también tiene el presidente que ha empezado a llamar a su contrincante con el nombre de Analberto Fernández en los actos de campaña.

Sectores de la alianza que conforma el gobierno propusieron eliminar las PASO, principalmente por su costo, casi 4 mil millones de pesos, lo mismo que gastamos por semana en intereses de Leliq, aunque este dato no fue mencionado. El ala más dura de la coalición propuso directamente eliminar la democracia y establecer un Emirato o alguna monarquía de ese tipo. Más teniendo en cuenta que la mejor carta que tiene el oficialismo ha desaparecido. Se la vio por última vez inaugurando obras pero en Capital Federal. ¿Dónde está Mariu? Preguntan todes, en especial los vecinos de La Plata, esa extraña  ciudad donde se puede ver a la pantera rosa haciendo un piquete, a Lord Vader cortando una calle, donde arrestan a Papa Noel y homenajean a Batman por su solidaridad… ¡Y todo sin luz, imagínense!

La pelea de fondo en esta  instancia siempre es por el voto de los llamados indecisos. Mientras la izquierda se acomoda para estar a la altura de los tiempos de corren, sectores de la población están decidiendo si niegan el voto a uno u otro candidato por el color del pañuelo. Parece que 4 millones de nuevos pobres, 10 mil pymes fundidas y 10 generaciones endeudadas no alcanzan para decidirse. Pero hay otro tipo de indecisos, aquellos que dicen “No soy K ni M, soy librepensador”. Son los peores, se paran en un pedestal, así como Del Pla, creyéndose Montesquieu, pero no son más que tibios mezclados con burro, algunos más de lo uno que de lo otro.

Añorando esos tiempos donde todo era más fácil y los radicales eran radicales, los peronistas eran peronistas y Macri un simple contrabandista que soñaba con ser presidente del club de sus amores, los medios harán de esta campaña una tierra de fantasía donde todo puede suceder pero donde principalmente, todo puede suceder al mismo tiempo. La realidad política entra en una espiral que no va a hacer otra cosa que acelerarse cada vez más  hasta Agosto primero y después hasta Octubre hasta que nuestros celebros estallen de información, pescado podrido y virulentos discursos ante niños que están ahí para otra cosa.

Todo será rápido y furioso, pero seguro que aburrido no.